Rosita y su único deseo

Muchos niños escribían sus cartas a Santa Claus para el 24 de diciembre.

Se acercaba el día de Navidad y Rosita tenía un deseo muy especial.

Los niños escribían que querían muchos juguetes. La mayoría de los juguetes que los niños pedían eran muy costosos. Pero los niños tenían la creencia que Santa podia traer cualquier juguete que ellos quisieran sin importar el precio.

Algunos de los juguetes que los niños pedían eran bicicletas, patines, juegos de cocina, columpios, computadoras, juegos electrónicos y resbaladillas.

Entre estos niños había una niña llamada Rosita, que solo deseaba una muñeca de trapo. Con letras grandes y un marcador rojo ella escribió:

Amado Santa,

Para esta Navidad, te pido por favor solamente una muñeca de trapo.

Muchas gracias,

Rosita

Rosita tenía la seguridad que Santa le concedería su deseo.

Mientras tanto, las cartas de las hermanas de Rosita estaban escritas con grandes demandas de juguetes lujosos.

Las hermanas  pedían ropa de marca, juguetes electrónicos, computadoras, bicicletas, golosinas y pinturas.

Cuando la mamá de las niñas  leyó las cartas de sus hijas, realmente se impresionó al ver la carta de Rosita y se desilusionó al ver las excigencias de sus otras dos hijas.